Las pruebas PISA (Programme for International Student Assessment) son una evaluación internacional que realiza la OCDE cada tres años para medir los conocimientos y competencias de estudiantes de 15 años en lectura, matemáticas y ciencias. Su objetivo es valorar en qué medida los jóvenes están preparados para afrontar los retos de la vida adulta, más allá de lo que aprenden en clase. Los resultados permiten comparar el rendimiento educativo entre países y orientar mejoras en los sistemas de enseñanza.